Cualquier pretexto por nimio que
sea sirve a la agrupación de Izquierda Unida de Gijón para alimentar el
enfrentamiento que padecen. Esta vez fue el homenaje que un bando (el de los
críticos) rindió a la
Pasionaria con motivo del 25 aniversario de su fallecimiento,
afeado públicamente por el otro (el del aparato). Resulta increíble que, cuando
más se necesita la unidad en torno a un programa político (el que una a toda la
izquierda, el que sirve para oponer como alternativa al neoliberalismo), se
dediquen a descalificarse unos a otros. Yo les recomendaría que, si quieren
hacer algún homenaje, lo hagan al ciudadano de la calle, a los millones de
ciudadanos anónimos que somos las víctimas del despropósito y la cerrazón de
unos políticos que no ven más allá de sus propias narices.
Gijón, 24-11-2014
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