viernes, 8 de agosto de 2014

Una valoración particular de las elecciones europeas


A tenor de la campaña electoral y el resultado de las recientes elecciones europeas, se me ocurre hacer la siguiente valoración:
Puesto que en España ganó Rajoy, que Zapatero le entregue el avión Falcon, usado por éste en sus desplazamientos electorales, y del que aquél tanto habló. Que el juez que sigue la instrucción del presidente de la comunidad valenciana, señor Camps, acusado de corrupción, se inhiba del caso al haber quedado absuelto por sus votantes. Otro tanto para el caso de corrupción ‘Gürtel’ que se sigue en Madrid contra el Gobierno de Esperanza Aguirre.
Respecto al resultado de las elecciones en el resto de Europa, los trabajadores debemos felicitarnos por el triunfo de la derecha ya que eso puede suponer, entre otras cosas, que lleven adelante su propósito de implantar la jornada laboral de 68 horas semanales y suprimir de paso los convenios colectivos. ¿Para qué los queremos? Particularmente satisfechos debemos sentirnos por el triunfo de Berlusconi en Italia, verdadero espaldarazo a su fastuosa vida de moderno sultán europeo (como se ha sabido recientemente, su villa Certosa, en la isla de Cerdeña, en nada tiene que envidiar al antiguo Topkapi de Estambul).
En general, los ciudadanos debemos sentirnos contentos de haber recompensado a la derecha, principal valedora de la política neoliberal que, al decir de los expertos, nos llevó a la actual crisis económica. Después de todo, bien se merecen los especuladores financieros una compensación por el susto que se llevaron.
El libro “El desgobierno de lo público”, de Alejandro Nieto, (Ed. Ariel), informa detalladamente sobre el permanente atraco que los partidos políticos hacen a la Administración Pública. Conciben el Estado como un botín a repartir. Lo del avión de Rajoy no fue más que un burdo señuelo para ganar votos.


                                                                          Gijón, 8-6-2009   

No hay comentarios:

Publicar un comentario