viernes, 8 de agosto de 2014

Tiempo de canallas


El título no es mío, se lo copié al juez Garzón. Pertenece a un escrito suyo que se publicó el 28 de febrero de 2004 en El País. Aludía a los responsables de la invasión de Irak, una guerra que recuerdo muy bien porque veo todos los días en los medios el infierno en que convirtieron aquel país. Recuerdo las multitudinarias manifestaciones a las que acudí en compañía de mi familia en vísperas de aquella locura con la esperanza de evitarla. Entonces sabíamos que nos estaban engañando; que no había armas de destrucción masiva; que era un pretexto para que las grandes multinacionales, verdadero poder en el mundo, obtuvieran pingües beneficios. El tiempo nos dio la razón: nos engañaron. Pero el mal estaba hecho y los responsables… de rositas. El juez Garzón alzó valientemente su voz: “Tiempo de canallas”. Lo pagó caro. Es arriesgado meterse con los poderosos. No puedo quitar de mi cabeza esta idea: “Tiempo de canallas”.

                                                         Gijón, 16-2-2012


No hay comentarios:

Publicar un comentario