Los dos ejes principales,
revelados por Aznar en la reciente convención de su partido en Madrid, sobre
los que el PP centra sus ataques al Gobierno español son: el Estatuto catalán y
el terrorismo etarra y ambos se fundamentan en meras falacias.
Respecto al primer punto, se
acusa a Zapatero de hacer concesiones al tripartito catalán para poder
gobernar. Nada más cierto, pero eso forma parte de las reglas del juego
democrático. ¿Es que el primer Gobierno de Aznar, que no tenía mayoría en el
Parlamento, no hizo lo mismo con CiU y el PNV? ¿Recuerdan cuando Aznar hablaba
catalán en la intimidad? Esa estrategia fue aprovechada por ambas fuerzas
nacionalistas para extender sus ambiciones autonómicas sin que nadie montase la
menor escandalera política. Pero es que en su segunda legislatura, que sí
contaba con la mayoría, fue aún más nefasto en ese sentido porque su torpe
política de confrontación entre el nacionalismo central y los nacionalismos
periféricos exacerbó tremendamente el sentimiento identitario en ambas
regiones. De ahí salió el plan Ibarretxe y ERC aumentó sus diputados en Madrid
de 1 a 9.
Es gracias a la política de Zapatero que el plan del lehendakari ha sido
neutralizado y el ‘Estatut’ encauzado en la Constitución.
Respecto a ETA, Aznar no sólo
negoció con la banda, sino que acercó sus presos a Euskadi (135) y se refería a
ellos con el nombre de Movimiento de Liberación Nacional Vasco. ¿Recuerdan
alguna protesta de las víctimas del terrorismo o la más mínima crítica de la
oposición de entonces?
Finalmente, no me resisto a
hacer una pregunta. ¿Señor Zaplana, realmente aún no sabe usted quién fue el
autor material e intelectual del atentado del 11-M? Bochornoso.
Gijón, 5-3-2006
No hay comentarios:
Publicar un comentario