lunes, 4 de agosto de 2014

La necesidad de la izquierda


En los tiempos de desorientación política en que vivimos es habitual encontrar a personas que sostienen que lo de la izquierda y la derecha es cosa del pasado además de resultar contraproducente porque sólo sirve para crear conflictos. Es un error que pagamos muy caro porque este concepto pertenece a la ideología neoliberal imperante que considera la política como algo perverso.
Para comprender el sentido de los conceptos políticos de izquierda y derecha y su repercusión en el devenir de la humanidad de los últimos tiempos, tenemos que situarlos en el contexto histórico. Resumiendo mucho, se puede decir que la derecha, asociada al liberalismo burgués, lideró en el siglo XIX el Estado de derecho liberal que defendía las libertades individuales incluso contra el propio Estado que se reducía al papel de gendarme (policía, ejército y tribunales que garantizaban la seguridad y la propiedad). Un Estado hecho a medida de los ricos que detentaban el poder y que impusieron un capitalismo salvaje.
La exclusión y la miseria originadas por esta despiadada política generaron la ideología de la izquierda que, conducida por el socialismo, los sindicatos obreros y pensadores como Keynes, reivindicó y estableció con enormes sacrificios los derechos relacionados con la igualdad. Surgió así el Estado social y democrático de derecho que asumió el papel de redistribuidor de la riqueza, a la vez que protegía a los más desfavorecidos con la creación de los derechos llamados de la segunda generación (trabajo, sanidad, educación, protección ante la adversidad, etc.). Por esta vía se alcanzó el Estado de bienestar que disfrutó Europa después de la II Guerra Mundial.
En la actualidad el proceso de la globalización neoliberal debilitó los Estados nacionales que pierden protagonismo y capacidad de control de los flujos de capital, volviendo así la exclusión y las injusticias sociales del pasado. De ahí la necesidad de retornar a las políticas de la izquierda.


                                                                  Gijón, 27-7-2013

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