Con el ánimo
sobrecogido por la masacre cometida por el ejército más poderoso de la Tierra contra el pueblo
iraquí, prácticamente indefenso, recibo la triste noticia de la muerte en el
escenario bélico del corresponsal del diario “El Mundo”, Julio Anguita. Para
mí, doblemente triste por darse la circunstancia de ser el hijo de Julio
Anguita, uno de los políticos más dignos, coherentes y honestos que ha tenido
la reciente democracia española. Una persona, que de manera tan valiente como
radical se opuso al bombardeo de Yugoslavia por parte de la OTAN cuando estaba de
coordinador general de IU, al igual que rechaza, como militante de dicha
coalición política, la actual guerra por considerar que el derecho de las personas
está por encima de los intereses de algunos, ha sido golpeado directamente por
la misma.
El la primera
declaración ante los medios Julio Anguita señala a los malvados responsables de
esta guerra como los verdaderos culpables de esta muerte, y advierte, además,
que va a luchar por traer a España la tercera República.
Por
considerar que, efectivamente, esta monarquía constitucional que tenemos está
amparando un sistema político que se muestra incapaz de representar los
derechos y las libertades de los españoles, me sumo al deseo y la intención de
Anguita para reclamar la tercera República.
Gijón, 8-04-2003
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