El personal de cirugía del
hospital de Cabueñes y algún que otro paciente del mismo servicio nos alertan a
través de los medios de la preocupante situación de precariedad en la que está
trabajando el departamento, desbordado a todas luces por la creciente demanda.
Los que por desafortunadas circunstancias nos vemos obligados a hacer uso de
los servicios sanitarios mencionados nos encontramos con la desagradable
sorpresa de la existencia de listas de espera que demoran hasta tres y cuatro
meses las exploraciones médicas necesarias para conocer el diagnóstico, cuya
rápida detección resulta en muchos casos vital para la curación.
En tales circunstancias uno no
puede menos que acordarse de la palabrería hueca de bastantes políticos que tal
parece que su obsesión es pedir más autonomía para el Principado con el
argumento de que, al acercar el servicio al ciudadano, se mejora la calidad de
aquél. Asturias tiene ya la competencia política sobre la Sanidad y, como se ve,
ello no se traduce en mejor asistencia.
Esta penosa situación pone en
evidencia la desvinculación de determinados políticos de los verdaderos
problemas de los ciudadanos y demuestra hasta qué punto desvían la atención
pública, centrándola en asuntos artificiales que sólo benefician a una minoría
de oportunistas (identidades, nacionalismos, idiomas...) y dejan de lado lo que
afecta realmente al ciudadano en su vida diaria: sanidad, trabajo, integración
social, vivienda, asistencia social, etcétera.
Gijón, 4-2-2006
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